La noche que si mereció la pena fue la observación del 22 de julio 2009. Decidimos ir cerca del puerto de los Alazores varios de nosotros con el fin de calibrar las “nuevas monturas” de Valentín y Edu, mientras Ros, Antonio Rivas y yo mismo nos dedicábamos a montar la óptica de Antonio en la Losmandy de la Sociedad. Y la noche fue fantástica. Un cielo oscuro cerca del Puerto de los Alazores. Un viaje largo pero que merece la pena si uno piensa pasar toda la noche trabajando.
Tuvimos la oportunidad de probar uno de los antiguos Celestron 8 color butano (el “butanito”) con seguimiento (el “butanito” viene con montura ecuatorial motorizada con dos motores y sus reductoras a 220V., así que se utilizó un trasformador de 12V a 220V.) He de confesar que se portó muy bien tanto ópticamente como mecánicamente. También fueron muy bien las mecanizaciones que se probaron así como el tubo óptico (un apocromático) que dejó al personal más que impresionado de su calidad acompañado de un cielo oscuro y un juego de oculares de “echa pa tra”.